Entre los años 1979 y 1987, Michael Jackson fue el gran dominador del pop. Su alianza junto a Quincy Jones fue la clave para que surgiera una trilogía de álbumes, formada por Off The Wall, Thriller y Bad, tejidos de una ambición faraónica por transcender. El resultado de tales pretensiones se tradujo en el pico más alto del concepto de súper pop, materializado en algunas de las canciones más sublimes de todos los tiempos: Don t Stop Til You Get Enough , Billie Jean o Smooth Criminal . Sueños de escapismo nace con la intención de mostrar de qué están hechas estas canciones cuya ansia es alcanzar la perfección a toda costa, y cuál fue el coste que tuvo que pagar Michael Jackson a nivel personal. Como el Peter Pan que necesitaba huir del yugo de su padre, la respuesta del Rey del Pop fue embarcarse en una misión épica que acabó con su salud mental. Su lema fue no parar hasta tener suficiente , pero nunca supo poner el freno. Entre los restos del incendio, dejó un reguero de inspiración que, a día de hoy, sigue provocando espasmos de excitación. Luces y sombras de un talento, Sueños de escapismo evita el cotilleo típico sobre la figura de Michael Jackson. Entre sus páginas no hay ganchos sensacionalistas ni nada que pueda pervertir el origen de sus enormes logros artísticos. ¿Para qué? ¿No resultará siempre más inspirador volver a la magia disco de Off The Wall o los hits de relumbrón que pueblan Thriller?