¿Qué es AIRON MAN? ¿Otro sublime producto de la insigne factoría FXgràfic? Eso sería decir poco de tan magna obra. Tal afirmación, aún siendo tan verídica como un chiste de Paco Gandía, no haría justa justicia a este cómic. No, porque AIRON MAN es mucho más que todo eso. AIRON MAN es emoción a mansalva, acción a toneladas, intriga a raudales, humor a diestro y siniestro y, además, hay una manta de hostias, mamporros, guantazos, mordiscos y porrazos que te cagas por las patas abajo, tú. Y el caso es que la cosa empieza de manera harto previsible. Tony Spar, bajo su desconocido alter ego de AIRON MAN, debe enfrentarse al malvado Mandalín para salvar al mundo de la amenaza comunista. " Coño, la misma historia de siempre!" diríais muchos de vosotros, curtidos seguidores de las series Marvel o de las parodias de FXGRÀFIC. Pero, y si os decimos que en nuestra historia salen como media docena de AIRON MANES diferentes, varios militares americanos haciendo el gilipollas sin que medie en ello la guerra de Irak, un restaurante chino especializado en gato agridulce y donde no ponen rollitos de primavera, una rubia de bote con peinado a lo Sandra Dee que el Tony Spar no se ha tirado todavía y un sencillo y vulgar mecánico no contaminado por el sueño americano que se convierte en un nuevo superhéroe con poderes de mosca... ¿A qué ya os pica el gusanillo? ¿Eh? Pues qué hacéis ahí con la cara de bobo que no estais leyendo ya el tebeo, leñe!