En La travesía del Louvre el autor pasea a través de los
60.000 m2 de la pinacoteca más importante del mundo,
cuyas paredes albergan 5.000 años de la historia del arte.
David Prudhomme, utiliza su visión imaginativa de historietista
para observar, no solo las obras de arte del museo
más célebre del planeta, sino también a los 7.000 visitantes
que lo recorren cada día.